Con su venia, presidenta.

De una manera especial todas y todos los mexicanos tenemos una conexión singular con Guadalajara, no importa dónde hayamos nacido, nuestro vínculo con Guadalajara hace que nuestro corazón lata a ritmo del mariachi.

Famosa, entre muchas otras cosas, por sus plazas coloniales, su fútbol y su comida, Guadalajara es un orgullo nacional, cuya belleza arquitectónica solo es sobrepasada por la calidad de su gente.

Visitar Guadalajara es maravillarse con su música, sus fiestas y su vibrante alegría que nos invita a tomar un tequila al ritmo de un mariachi para después recorrer sus calles, que tanto de día como de noche resultan dignas de una postal.

La magia de Guadalajara es tan extensa que sobrepasa el territorio nacional, su cultura llega a otros países y hace que el corazón nos dé un sobresalto cuando escuchamos en otras naciones sonar el jarabe tapatío.

Pero Guadalajara no solo es mariachi y tequila, no; también ha sido cuna de importantes artistas e intelectuales, desde José Clemente Orozco hasta Guillermo del Toro, pasando por supuesto por el célebre Pepe Guizar, autor de la pieza "Guadalajara, Guadalajara.

En este mes, el 14 de febrero, conmemoramos 479 años de la fundación de Guadalajara, que se traducen en 479 años de orgullo tapatío, al igual que de crecimiento y contribución al desarrollo nacional.

Su aniversario no podía ser en otra fecha que el 14 de febrero, quizá por ello esta ciudad nos ofrece en cada una de sus calles la oportunidad de encontrar una amistad sincera y de enamorarnos más de nuestro México.

Esperemos que cada año la Perla Tapatía nos siga inspirando con su belleza y que muchas victorias más se celebren en su ya famosa Minerva.

Es cuanto.